Otoño en el Río Esmeralda
Un adelanto de la revista del mes de Septiembre
© Federico García Maroto
En la cornisa sur de la Sierra de Urbasa (Navarra) se encuentra el Balcón de Pilatos, un impresionante anfiteatro y mirador natural sobre el valle de las Ameskoas. Es precisamente aquí donde las aguas filtradas a través de la meseta kárstica de Urbasa encuentran su salida, desplomándose en una cascada de más de 100 metros y formando el río Urederra, sin duda uno de los más bellos de nuestra península. Aguas puras y cristalinas, sobre blancos lechos calizos, dan lugar a innumerables pozas de aguas cuyas tonalidades varían desde el turquesa a un azul intenso, según su profundidad y la luz que las ilumina. Estas cualidades debieron ser apreciadas por los lugareños, quienes llamaron a este río Ur-Ederra, literalmente “aguas hermosas”.
© Paco Fernández
Su gran variedad de ambientes ecológicos propicia una rica vegetación en el entorno del Urederra, en la que se mezclan el bosque atlántico y el mediterráneo. El río atraviesa un hayedo xerófilo implantado sobre suelo calizo-dolomítico, acompañado de un variado bosque de ribera. Junto a las hayas se mezclan serbales, tilos, robles, fresnos, olmos, arces, álamos, avellanos, sauces, espinos, tejos, bojes, enebros, etc. Todo un cóctel que garantiza la increíble gama cromática que podemos disfrutar durante el otoño. Su enorme riqueza medioambiental hizo que en 1987 fuese declarado Reserva Natural, integrándose dentro del Parque Natural de Urbasa-Andía.
© Federico García Maroto